Una vez más, la Cavallerizza de Lucca acoge una gran exposición firmada por Vittorio Sgarbi.
Un sugestivo itinerario acogido en una ciudad que vivió varias épocas a la vez y en la que el Neoclasicismo supo expresarse con grandes artistas, arquitectos y urbanistas.
Antonio Canova realizó las experiencias decisivas, tanto técnicas como intelectuales, que le convirtieron en el máximo exponente de un arte, la escultura, al que el Neoclasicismo devolvió la supremacía que ya ejercía en los albores del Renacimiento.