El camino de San Jacopo, al igual que la Vía Francigena, es un viaje histórico y cultural, una sucesión de paisajes para disfrutar a paso lento.

El Camino Jacobeo de Florencia a Lucca, recorre la más antigua Vía Cassia / Clodia de Florencia a Lucca, a través de territorios y paisajes en los que se han engrosado la historia, el arte, la naturaleza y la devoción.


Partiendo de las colinas de Pescia, antes de llegar a Lucca pasamos por la iglesia de San Cassiano a Vico, del siglo VIII, reestructurada varias veces hasta llegar al elegante diseño actual del siglo XVIII, y luego por la localidad de "Acqua Calda", donde recorremos el canal que alimentaba las estructuras industriales de finales del siglo XIX y donde los grandes edificios neogóticos, ahora abandonados, recuerdan un pasado industrioso y la curiosidad de los aficionados a la arqueología industrial.


Se trata del canal que, en el centro histórico de Lucca en la "via del fosso" en la Edad Media suministraba energía a las industrias de la ciudad y hoy es una de las calles más características.
La ruta continúa por el carril bici-peatonal que bordea el río Serchio y por el que se llega a Lucca cerca de Porta San Jacopo. En este punto se encontraba la antigua iglesia de San Jacopo alla Tomba, construida sobre los restos de una antigua necrópolis anterior.


En la época napoleónica, fue derribado para hacer sitio a una fábrica de papel y a un molino que pudiera aprovechar el agua del canal que en este punto entra en la ciudad y toma el nombre común de "acequia", atraviesa toda la ciudad por la calle del mismo nombre y sale por el lado opuesto primero por un largo tramo de las murallas medievales y luego pasando por debajo del Corso Garibaldi del siglo XIX, antes de volver a salir de las Murallas cerca de la fábrica de tabaco.


Desde Porta San Jacopo, puede continuar por Via dei Borghi, hacia Porta Santa Maria y desde aquí llegar a la catedral. Notarás, en el número ... una pequeña imagen de nuestro Apóstol, confirmando el paso de los peregrinos desde ese punto.
O puede seguir la vía del Fosso hasta la otra puerta medieval, la de San Gervasio y Protasio y desde aquí, cruzando plazas y callejones, llegar a la Catedral.

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